Nuestros océanos guardan infinita cantidad de secretos.
Tesoros escondidos...
Máquinas olvidadas...
Extrañas y peculiares criaturas cuya diversidad es prácticamente desconocida...
Tenemos al hermoso pez payaso (Amphiprion ocellaris).
Tenemos al no tan hermoso pez lobo (Anarhichas lupus).
Tenemos al rarísimo y mortal pez león (Pterois antennata).
Tenemos al mítico caballito de mar (Hippocampus jayakari).
Y tenemos a una de las criaturas más extrañas y llamativas que hay en toda esa hermosa y temible mega extensión de agua salubre.
Si a ti te dicen que hoy, en el mar, podrías encontrarte a un dragón marino probablemente pensarías que te estarías topando con una criatura inmensa, bestial, aterradora.
Puede ser que te imagines algo como esto.
O como esto.
Este también parece epico.
Lo sé...
Pero el "bicho" que nos ocupa esta más bien lejos de ser un animal capaz de sembrar el terror en el fondo marino.
Te presento al Phycodurus eques.
Mejor conocido como el dragón de mar foliáceo.
Un animalillo bastante enigmático y llamativo pero para nosotros los latinos, bastante lejano, puesto que residen en las costas del sur de Australia.
Perteneciente a la familia Syngnathidae, este extraño animal puede llegar a medir hasta 40 cm (mucho más grande por ejemplo, que el caballito de mar) y como puedes observar, su cuerpo presenta una serie de prolongaciones cuya función es servir como camuflaje ante sus depredadores.
A vista simple, pareciera ser una alga o algún pedazo de vegetación marina.
A vista simple, pareciera ser una alga o algún pedazo de vegetación marina.
Aunque dan la impresión de parecer animales aletargados o lentos, nadando pueden alcanzar una velocidad de más de 100 kmh.
Se alimentan de plancton y peces recién nacidos, así como también de minúsculos crustáceos y camarones.
Además debes saber que tiene un hermano!! Sí!! el Phyllopteryx taeniolatus, mejor conocido como el dragón marino común o algáceo.
Muchos más colorido y sin un aspecto tan florido.
Estos peces se mueven lentamente y dependen de su camuflaje como protección contra la depredación.
Flotan en el agua y con los apéndices en forma de hoja se parecen a las algas que se mecen de su hábitat.
Carecen de una cola prensil que permita a especies similares abrocharse y anclarse.
Los individuos se observan solos o en parejas; alimentándose de pequeños crustáceos y otros zooplancton chupando presas en sus bocas sin dientes.
Despidamos al dragón marino con un video.
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